Tarta de Cerezas

No hay nada más americano que una Cherry Pie. En nuestros viajes a USA tuve la ocasión de probarlas en un montón de sitios y catar sus sabores para ver si era lo que había imaginado.

La primera vez que probé una Cherry pie fue en casa de una amiga americana en los años 80 y ese día sabía que querría hacerla en cuanto pudiese.

Hemos probado todo tipo de recetas hasta encontrar ésta que ha sido la clara vencedora.

El primer bocado se siente como el de una compota o mermelada, pero lo que le hace especial es encontrar los trozos enteros de cereza.

Ahora que hemos elaborado esta receta y la hemos probado, entendemos por qué uno puede llegar a obsesionarse con este tipo de postre.

Nuestra Cherry Pie tiene una deliciosa base crujiente y ligera y un relleno de compota de cerezas que espesamos un poco con maicena para hacerla consistente al cortarla sin perder su jugo.

El resultado es una deliciosa tarta bastante fácil de elaborar con una base crujiente y rellena de compota de cerezas.

Te recomendamos hacerla cuando las cerezas están en época. Algunos prefieren hacerla con cerezas deshuesadas congeladas para ahorrarse la parte de eliminar el hueso.

Asegúrate de hacerla unas horas antes de disfrutarla para que se enfríe por completo (aunque he de reconocer que a mi me encanta recién horneada y calentita) Si quieres adelantar trabajo puedes hacer el relleno unos días antes.

Anímate a hacerla y probarla, busca esa ocasión especial para compartirla y verás cómo triunfa.

Ingredientes para la masa

Estas medidas son para un molde desmoldable de 22 cm de diámetro. Si te sobra masa para la base y relleno, puedes hacer galletas redondas con su relleno en el centro.

• 150 g de mantequilla fría
• 300 g de harina
• 60 g de azúcar glass
• 1 huevo
• ½ cda. de agua

Para el relleno

• 1,5 kg de cerezas frescas deshuesadas
• 150 g de azúcar glass
• 1 limón (zumo y piel rallada)
• 2 cda. de esencia de vainilla
• 2 cda. de Maizena

Para el pincelado

• 1 huevo
• 1 cda. de leche

Elaboración de la masa

Mezcla la mantequilla, haría y azúcar glass en una batidora eléctrica hasta que obtengas la textura arenosa.

Mezcla en un bol a parte el huevo y el agua y después añade esta mezcla a los ingredientes secos poco a poco hasta obtener una masa homogénea. Es probable que no necesites añadir la mezcla completa de líquido. Sin necesidad de amasar, guarda la masa en papel film y déjala en la nevera para que enfríe durante 30 minutos.

Elaboración del relleno de cerezas

Elimina los huesos de las cerezas (lo ideal es utilizar un deshuesador).

Coloca las cerezas, azúcar, ralladura de limón y la vainilla en una olla suficientemente amplia. Cuece la mezcla a fuego medio de 5 a 10 minutos hasta que las cerezas empiecen a abrirse. Puedes aplastarlas un poco con una cuchara de madera. Mezcla a parte el zumo de limón y la maicena y añáde la mezcla a las cerezas. Remueve de forma constante hasta que la mezcla espese. Necesitarás una textura un poco gruesa para que la tarta mantenga su forma al cortarla. Retira y deja que enfríe.

Montaje de la Cherry Pie

Pre-calienta el horno a 175º. Divide la masa en dos bolas, una ligeramente mayor que la otra. Pasa el rodillo a cada bola entre dos hojas de papel film y retira un lado del papel cuando cada parte esté totalmente estirada y tenga un grosor aproximado de 5 mm.

Coloca con mucho cuidado la parte mayor de la masa sobre el molde dejando el papel film hacia arriba. Poco a poco encaja la masa en el molde. Una vez que esté bien colocada retira el papel film restante. Corta el exceso de masa que pueda quedar, envuélvela en papel film y métela nuevamente en la nevera. La utilizarás más tarde para decorar la parte superior de la tarta.

Introduce la masa en el horno 15 min a 170º y sácala del horno dejándola enfriar unos minutos.

Ahora rellena la base del molde con las cerezas cocinadas. Coge la parte menor de la masa y retira una hoja de papel film. Coloca la masa en la parte superior de la tarta con el papel film en la parte superior. Retira el resto de papel film y acaba de colocar la masa para que encajen bien los bordes de la tarta en el molde. Si quieres darle una forma como la de la fotografía, corta tiras de igual tamaño y vete colocando una a una intecalándose entre sí.

Con un pincel baña la parte superior de la masa con la mezcla del huevo y la leche.

Tu tarta está lista para el horneado final. Introdúcela en el horno durante 35 minutos a 165º.

Puedes servirla calentita y con una bola de helado de vainilla, o tomarla fría. Sea como sea, disfruta de su delicioso sabor.

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